BIOPSIA DE LA PROSTATA
Cuando existe la sospecha de que pudiera haber un cáncer de próstata, ya sea porque el antígeno prostático específico o el tacto rectal hayan sido anormales, se procede a efectuar una toma de biopsias de la próstata guiadas por ultrasonido transrectal. Este estudio dura aproximadamente 20 minutos y es ambulatorio. Se hace bajo sedación por lo que resulta indoloro.
Normalmente se hace una preparación previa a la biopsia. A los que toman aspirina o anticoagulantes, se les pide que los dejen de tomar unos días antes del procedimiento para evitar hemorragias. Además, para evitar infecciones se prescribe un antibiótico un día previo y varios días después a la biopsia, así como un enema previo al estudio para que el recto se encuentre libre de materia fecal.
Ya una vez sedado, se introduce un trasductor de ultrasonido por el recto, se explora la próstata y se introduce una aguja que toma pequeños cilindros de tejido de las diferentes áreas representativas de la próstata, normalmente se toman 12 biopsias.
Después de la biopsia, y una vez recuperado, el paciente se va a su casa. Es conveniente que ese día guarde reposo, y al día siguiente puede iniciar sus laboras habituales. Ese día, y los subsecuentes dos o tres, la persona puede sangrar al momento de orinar, si esto sucede únicamente hay que beber líquido en abundancia. Pueden salir algunas gotas por el recto que con el reposo se quitan. Si el sangrado es mas profuso, es conveniente comunicarse rápidamente con el doctor.
Si esa noche, o las subsecuentes cuatro o cinco, se presenta fiebre, escalosfríos o cuerpo cortado, es urgente comunicarse con el doctor, ya que pude estarse instalando una infección, y es urgente combatirla inmediatamente.
Unos cuantos días después, tendrá una cita para revisar el resultado, si desafortunadamente se corrobora la presencia de un cáncer, se procederá a etapificar la enfermedad para decidir cuál es el mejor tratamiento.